Más de 300 estudiantes de distintas carreras y campus de la Universidad forman parte de esta nueva edición del diploma.
Con gran éxito se desarrolla la segunda versión del Diploma de Inclusión y Diversidad para futuros profesionales, programa gratuito certificado por la Dirección de Docencia y dictado por el Centro de Apoyo al Desarrollo del Estudiante (CADE) en colaboración con distintas unidades de la Universidad de Concepción, entre ellas, ARTIUC, INCLUDEC y DEGYD.
En esta nueva edición, participan 343 estudiantes de los distintos campus de la Universidad, quienes, a través de 15 módulos online asincrónicos, podrán especializarse en distintas materias relacionadas a diversidad e inclusión con enfoque de derechos.
La coordinadora de la unidad de inclusión del CADE, Andrea Borzone Valdebenito, nos señala que la idea detrás de este diploma surge debido a distintas limitaciones en las mallas curriculares de los futuros profesionales con respecto a temas de esta índole: “es una necesidad a nivel nacional el actualizar los programas curriculares y que tengan un enfoque inclusivo, porque a nivel mundial, la sociedad tiene que ser más diversa, más inclusiva y, aunque las carreras se han ido actualizando, falta mucho por fortalecer en aspectos que tienen que ver con inclusión”.
Borzone manifestó que, tanto ella como el equipo de inclusión del CADE, están muy contentas con este récord de participación en el diploma y que esperan poder generar un cambio real en quienes lo cursan: “si logramos que una persona en su futuro como profesional sea un agente inclusivo y de cambio, ésta va a traspasar esa actitud inclusiva a las personas con las que se vincula, y la idea es que sean capaces de ejercer su profesión, pero con esta sensibilidad que les permite valorar la diversidad”.
“Algo que refleja, no solamente el diploma, sino que todas las actividades de la unidad de inclusión, es la visión y la creencia absoluta que tenemos en que se puede hacer un cambio social cuando uno educa a las personas en temas de inclusión”, agregó.
En tanto, Montzerrat Robles Núñez, estudiante de quinto año de Trabajo Social, quien actualmente está cursando el diploma, comenta que, una de sus principales motivaciones fue adquirir mejores herramientas para su desempeño laboral: “actualmente realizo mi práctica profesional en la unidad de inclusión del CADE, y cursar el diploma me pareció una buena oportunidad para tener una formación mayor en este tema”.
La modalidad del curso resulta beneficiosa para ella, ya que, al ser estudiante en práctica, gran parte de su día lo dedica al trabajo en la unidad de inclusión, por lo que gracias a las clases asincrónicas puede continuar su formación en sus tiempos libres o los fines de semana.
Para cerrar, Robles comentó que, en su opinión, existe una falencia con respecto a temáticas de inclusión en el ámbito académico: “debería existir una formación más integral de la inclusión y el respeto en todas las carreras. Pero tampoco es una temática que se deba tomar a la ligera, sino que debe ser un buen proceso metodológico y práctico, y considero que sería de bastante ayuda para cualquier profesional que está en formación”.
Cabe destacar que las clases de este diploma se extenderán hasta el mes de agosto, en que el estudiantado podrá formarse en temáticas contingentes como marcos normativos, leyes de inclusión, buenas prácticas, lenguaje y educación inclusiva, entre otros temas.