El docente de la Facultad de Medicina, Dr. Juan César Olivos Pérez comparte un valioso testimonio sobre el desarrollo e implementación de un Serious Game -juego diseñado para enseñar- orientado a las técnicas de reanimación cardiopulmonar (RCP) y el uso del desfibrilador automático externo (DEA), en el marco del fondo regular Colabora.doc de la Dirección de Docencia.
La idea de crear este Serious Game, llamado ReanimaUdec surge cuando un compañero de magíster no sabía para que era el desfibrilador automático externo (DEA), que estaba instalado en la facultad. Este hecho reveló una preocupante falta de conocimiento sobre este dispositivo que puede salvar vidas en situaciones de emergencia. Al respecto, el docente se cuestionó: “¿De qué nos sirve tener desfibriladores en todas las facultades si nuestras y nuestros estudiantes no saben para qué sirven?”.
Respondiendo lo anterior, y con el objetivo de resolver esta brecha, nació la idea de crear un Serious Game, del tipo película interactiva. Este juego pretende simular el estrés de una situación real para favorecer la comprensión de las técnicas correctas de RCP y uso del DEA, tanto para estudiantes de la salud como para aquellos no vinculados al área en una segunda etapa”, afirmó.
Al mismo tiempo, el Dr. Olivos nos relata la estructura y dinámica de ReanimaUdec. “Es un juego serio del tipo película interactiva, inspirada en la famosa película Black Mirror: Bandersnatch (2018), donde el jugador toma decisiones que afectan el desarrollo del juego, el que presenta dos posibles finales: la vida o la muerte, similar a los resultados de un paro cardiorrespiratorio de la vida real, lo que permite destacar la importancia de tomar decisiones correctas en este tipo de situaciones”.
Para conocer el impacto que tendrá en el desarrollo de las competencias específicas de reanimación cardiopulmonar en las y los estudiantes de medicina, el docente nos plantea una pregunta previa: “¿Sabrías qué hacer si un familiar cae al suelo inconsciente por un paro cardiorrespiratorio? Aunque muchos responderían afirmativamente basándose en lo visto en películas, el pánico de vivir una situación real puede paralizar incluso a los más estudiosos. “ReanimaUdec busca que los jugadores experimenten la emoción y la presión de una emergencia real, reforzando así los conocimientos adquiridos en los primeros años de carrera y fortaleciendo la autoconfianza para realizar una RCP eficaz”, manifestó.
El aprendizaje será evaluado mediante su inclusión en la asignatura de introducción a la práctica médica. “Una de las estrategias para evaluar el impacto del juego es su inclusión en la asignatura de introducción a la práctica médica. El juego, que tiene tres vidas y un máximo de 10 minutos para ser resuelto, otorga un puntaje que permitirá evaluar la mejora progresiva en los estudiantes a través del tiempo. Este juego, actualmente en su etapa final de desarrollo, será una contribución a la formación integral de nuestros futuros profesionales de la salud. ReanimaUdec no solo fortalecerá los conocimientos teóricos en RCP, sino que también fomentará habilidades como el trabajo en equipo y la toma de decisiones bajo presión. A través de una experiencia interactiva y envolvente, los jugadores adquieren conocimientos prácticos mientras se divierten y se involucran en la narrativa del juego”, indicó.
Inicialmente, el juego estará disponible para las y los estudiantes de medicina para reforzar sus conocimientos y confianza para realizar RCP. Posteriormente, basándose en esta experiencia inicial y las mejoras realizadas, se promoverá su uso en toda la universidad. “Todos, independientemente de la edad, somos susceptibles de sufrir un paro cardiorrespiratorio, y si me ocurriera a mí, quisiera que uno de mis estudiantes haya jugado el juego y me salve”, comenta el docente entre risas, resaltando la relevancia y alcance potencial de esta innovadora herramienta educativa.
El Dr. Olivos comenzó sus estudios de medicina en Santiago. Posteriormente, ejerció durante seis años como médico general de zona en el hospital de Chanco, describiéndolos como «de vacaciones». Luego, llegó a Concepción para cursar el postgrado en Radiología, seguido por una subespecialidad en Radiología Pediátrica en la Universidad Católica. De vuelta en Concepción, tuvo la oportunidad de enseñar en programas de postgrado, donde descubrió su vocación docente. Esto lo llevó a estudiar un magíster en Informática Educacional para la docencia en la Universidad de Concepción.
Con una sólida trayectoria en la medicina y la docencia, comparte su visión sobre la enseñanza: “Siempre he pensado que enseñar es como la ‘multiplicación de los panes’ descrita en la Biblia. Todo lo que aprendí de mis profesores lo multiplico al transmitirlo a mis estudiantes, quienes a su vez pueden llevar estos conocimientos y multiplicarlos con sus colegas o futuros estudiantes. Así, el conocimiento se expande y enriquece constantemente”, reflexiona.