Este año se comenzó a dictar en la Universidad de Concepción el primer curso complementario de sistema braille nivel inicial, el que enseña a los y las estudiantes de todas las carreras, el sistema de lecto escritura que utilizan las personas con discapacidad visual.
Esta asignatura está a cargo de la académica María José Vergara, quien cada viernes junto a Emma, su perra guía, se reúne con cerca de 30 estudiantes a aprender sobre Braille, pero también a derribar mitos y barreras sobre la discapacidad.
Respecto a la implementación de esta asignatura con este primer curso, la académica señaló que: “Con el estudiantado ¡ha sido una experiencia muy bonita, y hemos trabajado en conjunto el enfrentarse a algunos temas que no se hablan, como por ejemplo de la discapacidad visual, y conversarlo abiertamente ha sido bueno. Poder interactuar de una manera cercana y con respeto, ayuda mucho a derribar barreras en todos los sentidos”.
“Con mis pares también ha sido una buena experiencia y estoy muy agradecida de la Dirección de Docencia, en especial de Catalina Duarte que ha sido un tremendo apoyo para mí, porque conoce el trabajo que se hace en torno a la discapacidad y cómo hacer y valorar realmente la diversidad en el trabajo con los, les y las estudiantes”, añadió.
Estrategias didácticas para el aula
Captar la atención de sus estudiantes y buscar estrategias pedagógicas para el trabajo siempre es un desafío para los y las docentes, y para la Prof. María José la didáctica práctica y lúdica es fundamental en el desarrollo de su asignatura.
“Me gustan las clases activas, y se los menciono desde el inicio a mis estudiantes, porque así puedo tener también más conciencia de lo que está pasando en la sala, a través de tonos de voz, formas de respuesta, quién participa más y así me hago un panorama completo de la clase. Esta es una estrategia bastante importante, basada en la participación y actividades lúdicas”.
Además de esta práctica, la docente recalcó la importancia de la conexión con el estudiantado: “hay un montón de estrategias, pero la principal para mi es generar cercanía y acudir al diseño del nivel de aprendizaje, desde las redes afectivas porque, en mi experiencia, son la base para generar un aprendizaje significativo y poder involucrarse finalmente en él”.
Aprender en la diversidad
Inclusión y diversidad son palabras que la docente escucha a diario, pero en su opinión, más que saberlas por definición, hay que adherirlas a nuestro quehacer diario para vivirla día a
día: “nos cuesta entender que la diversidad más que la excepción es la norma, y en el aula debe ser siempre la norma”, agregó.
“A mí me gusta mucho imaginarme que tengo estudiantes con pelos de distintos colores, con chiquillos, chiquilles y chiquillas, lo disfruto harto y ser parte de la propia diversidad en el aula creo que también lo hace aún más interesante, porque lo estoy viviendo”.
Para la profesora, el cambio siempre debe caminar hacia la inclusión, y no solo hacia la palabra, sino que a la incorporación de ésta en todos los niveles: «Entiendo que esta asignatura se imparte por primera vez en la UdeC, lo que demuestra que estamos tomando la dirección adecuada al abrir puertas hacia la diversidad y la inclusión».
«Cuando le damos la oportunidad a nuestras, nuestres y nuestros estudiantes de explorar y aprender una nueva herramienta, el Braille, a través de una asignatura complementaria, no solo amplía su conocimiento, sino que también les proporciona la oportunidad de comunicarse, comprender e interactuar en forma directa con personas con discapacidad visual, fomentando la inclusión y la empatía en la comunidad estudiantil y docente. Cuando me preocupo de realizar los ajustes razonables para que las personas con discapacidad puedan participar de una manera digna, tranquila y equitativa también estoy haciendo inclusión”, ejemplificó.
Para cerrar, la docente agradeció a la Universidad por abrirse a la opción de crear esta asignatura y poder avanzar hacia el aprendizaje en la diversidad.
“Me gustaría agradecer la posibilidad de, además de enseñar el sistema de lecto escritura braille, el poder contribuir a la concientización de la diversidad. Además, resaltar el valor de que los, les y las estudiantes puedan interactuar con personas con discapacidad, que es algo que cuesta muchísimo y que además podamos hacerlo desde otro enfoque. También agradecer las libertades que también me he podido dar y siempre estaré atenta y disponible para poder seguir trabajando para generar cambios reales y sustanciales en el tiempo”, concluyó.