El curso es la continuación del Programa de Iniciación Pedagógica (PIP) de la Dirección de Docencia, y tiene por objetivo promover una formación de calidad y facilitar la implementación de la política institucional de pregrado.

Con motivo del cierre de una nueva y exitosa versión del Diplomado en Formación, Aprendizaje y Evaluación en Educación Superior, desarrollado por la Unidad de Investigación y Desarrollo Docente (UnIDD) de la Dirección de Docencia, las y los docentes participantes rindieron su evaluación final en dependencias de la DirDoc.

Dicha evaluación consistió en el desarrollo de una clase simulada, a través de una exposición oral que debía abordar y aplicar las herramientas adquiridas durante el paso por el diplomado. Las y los docentes fueron evaluados por una comisión conformada por un o una docente disciplinar, perteneciente a la misma facultad del profesional a evaluarse; un o una docente en calidad de pedagogo/a, proveniente de la Facultad de Educación; y un o una representante de la Dirección de Docencia, quién se encargaría de aplicar una rúbrica global de desempeño para la evaluación.

Para el coordinador del Programa de Iniciación Pedagógica (PIP) y representante institucional en la comisión evaluadora, Prof. Jorge Ávila Ávila, el proceso ha sido satisfactorio: “Hemos visto el resultado de las y los profesores en sus clases y vemos que lo que aprendieron lo están aplicando. Ese es el propósito del programa, es decir, poder ver todo lo que ellas y ellos aprendieron de manera más bien teórica y práctica, incorporando dicho trabajo en la sala de clases”, señaló.

Prof. Eliset Le Goff Muñoz, también integrante de la comisión en el ámbito institucional, destacó la importancia del programa para apoyar la docencia de la UdeC, ya que el PIP tiene como propósito mejorar la calidad del aprendizaje, las prácticas docentes e invitar a la reflexión pedagógica. “La idea es que el programa vaya evolucionando, siempre con una mirada puesta en las oportunidades de mejora. Hemos podido notar mucha disposición y motivación por parte de los participantes, para recibir una valiosa retroalimentación y visualizar mejoras”, afirmó la profesional.

Asimismo, el Prof. David Pizarro Santibáñez, quien también formó parte de la comisión, destacó el interés de las y los docentes, respecto a la forma en que se comunican e interactúan con el estudiantado. “Me ha impresionado gratamente la preocupación hacia las y los estudiantes, ya que enfatizan y le dan mucha importancia a sus problemas y necesidades. Eso definitivamente contribuye al desarrollo de una formación de calidad”, sostuvo.

El Programa de Iniciación Pedagógica (PIP) nace desde el concepto de promover la formación de calidad en las nuevas académicas y académicos de la UdeC, junto con acompañar y facilitar la implementación de la política institucional que caracteriza a la casa de estudios penquista. Por otra parte, el PIP viene a impactar directamente al mejoramiento de la calidad de los procesos formativos, a través de orientaciones y herramientas traducidas en un abanico de posibilidades metodológicas, estratégicas y evaluativas.

El Prof. Francisco Hernández Quidel, relator del programa PIP, se refirió a la fluidez del proceso evaluativo y al trabajo colaborativo logrado. “Hoy tenemos más experiencia en el ámbito evaluativo y, gracias al apoyo de la Escuela de Educación del Campus Los Ángeles y la Facultad de Educación del Campus Concepción, el proceso fue mucho más exitoso y eficiente. También destacó la disposición de las facultades que participaron en este proceso, ya que nos permitió contar con la participación de diferentes profesionales disciplinares”, enfatizó.

Testimonios de sus participantes

El docente Manuel Estay Montecinos, de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas, valoró positivamente el programa. “Todas las materias que revisamos fueron importantes y, en lo particular, hay algunas que me han ayudado mucho más que otras para el desarrollo de mis clases, como organizar y planificar de manera correcta las actividades”, señaló.

Para Álvaro Gallardo Vergara, docente de la Facultad de Medicina, las herramientas adquiridas a través del diplomado, “impactarán principalmente en las y los estudiantes que cursen sus primeros años de carrera, ya que la docencia debe considerar los conocimientos y habilidades pedagógicas necesarias, para que la enseñanza sea exitosa y motive al estudiantado”, afirmó.

La docente Gabriela Godoy Chandía, de la Facultad de Humanidades y Arte, destacó el ámbito pedagógico del programa y lo mucho que le sirvió para el desarrollo de una clase, ya que asegura que sus cátedras son esencialmente prácticas. “Una clase de un instrumentista es muy distinta a una tradicional y, si bien fue desafiante, me atreví a participar del programa y aprender ese lado más pedagógico que necesitaba para complementar mis clases”, aseguró la profesora de música.

Marianela Castillo Fernández, docente de la Escuela de Educación, Campus Los Ángeles, lleva 12 años trabajando en la Universidad de Concepción, y asegura que, a pesar de su trayectoria en la casa de estudios, el programa vino a aportar a su desarrollo profesional al ser “atingente y recoger elementos trascendentales que deben estudiarse en la actualidad. El PIP me ha servido mucho para refrescar y renovar conocimientos”.

El docente David Ramírez Sánchez, de la Facultad de Ciencias Biológicas, destacó la amplitud de las materias desarrolladas en el programa. “No es sólo de iniciación pedagógica, sino en realidad de iniciación en la Universidad. Está muy bien estructurada respecto a los lineamientos de la UdeC, las políticas y el nuevo Plan Estratégico. Me parece genial que sea conducente a un diplomado, porque nos ayuda y prepara para ser mejores docentes”.

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